Históricamente, la selección de Bolivia aprovecha una gran ventaja local al jugar sus partidos de sede en el estadio de La Paz. El problema con esta ventaja es que para sus contrarios, no acostumbrados a la altura del Altiplano Boliviano y más específicamente en la región donde está el estadio, a más de 3500 metros sobre el nivel del mar, esta ventaja se convierte en un riesgo para la salud de sus jugadores, así como lo que consideran una real desventaja física, polémica que lleva décadas y aún no cesan las quejas al respecto.

En el 2007 la FIFA propuso anular los partidos en alturas excesivas

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La medida, propuesta por Joseph Blatter a nombre de la FIFA, afectaría no solo a Bolivia, también Colombia, Perú y Ecuador cuentan con estadios a miles de metros sobre el nivel del mar, donde sus jugadores se sienten en casa pero los contrarios no pueden rendir al 100% además de, alegar las federaciones de otros países, exponer su salud.

El veto no logró imponerse. En los países afectados la fanaticada del fútbol y sus gobiernos tomaron posturas firmes y recordaron que al igual que sus estadios con gran altitud, hay países que tienen estados con humedad excesiva, calor extremo y otros factores naturales que afectan a sus jugadores pero que ellos jamás protestan ni piden vetar juegos en dichos estadios.

Países fuertes de la región

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Lo curioso en esta polémica es que los países que impulsaron la medida propuesta, fueron los que más copas del mundo han ganado y son reconocidos como los mejores en la región. Uruguay, Argentina, Brasil y Paraguay, al parecer estuvieron detrás de aquella movida que buscaba vetar el fútbol en las zonas a miles de metros sobre el nivel del mar. 

Las federaciones de fútbol en los países mencionados desde siempre han alegado la dificultad y riesgo para sus jugadores, tener que prepararlos por semanas para soportar un poco más la desventaja de jugar a esa altura y en ocasiones, han enviado un equipo B para no exponer a los cuadros de la selección al riesgo.

¿Qué ocurre al jugar fútbol a miles de metros sobre el nivel del mar?

A nivel médico existen ciertas desventajas para jugadores no acostumbrados. Hay estudios que indican que la capacidad aeróbica se reduce en más de un 25%, la dinámica del movimiento continuo en el fútbol sin suficiente oxígeno  por la altura, hace que se produzca ácido láctico, lo que se traduce en una gran fatiga.

Algunas federaciones combaten esta dificultad programando juegos amistosos en Bolivia, así sus jugadores conocen la dificultad del juego a gran altura. Sin embargo, en pleno campeonato es difícil tomar todos los días que se necesitan para programar un juego amistoso. Ante esta dificultad los médicos recomiendan que la selección visitante llegue la zona más de 12 horas antes, de manera que el organismo de los jugadores se vaya adaptando a la falta de oxígeno.

Cuando se asomó la posibilidad de vetar los juegos, algunos críticos de la medida alegaban un argumento cierto. Si Bolivia tuviera una ventaja tan gigantesca al jugar a más de 3500 metros sobre el mar, nunca hubiese perdido un solo partido en La Paz y eso no ha ocurrido, lo saben las grandes selecciones que se quejan de la altitud pero que han goleado a Bolivia en tales condiciones.